Despertar cada día, implica activar nuestra fuerza vital. Fluir por el camino como parte de esa energía cósmica universal, que es el origen de todo. Y en esa poderosa confluencia, se procesa nuestra transformación permanente. Un perfecto balance de emociones, para disfrutar del trayecto en paz.
Cuando luego de un reconfortante sueño, tenemos la dicha de ponernos en movimiento. Nos transformamos en el eje motor de nuestra vida. Damos impulso a todos los engranajes y tenemos el mando. Asumirlo con responsabilidad, alegría, ilusión y amor sin esperar nada a cambio es el mayor desafío.
Y el telón se vuelve a levantar. Y salimos nuevamente a escena. Es un constante cambio de escenario, de roles, de tareas. Mientras la vida nos sonría, somos la constante. Y actuar, crear, protagonizar, observar con amor, es desarrollar el arte de vivir. Expresarnos con amabilidad y una sonrisa, la confirmación.
Si la vida nos premia con otra oportunidad, nuestra naturaleza nos mueve a dar ese primer paso. A salir al camino para generar y compartir los frutos del esfuerzo cotidiano. Y en esa dura pero al mismo tiempo satisfactoria tarea, nos erigimos en paladines de alegría, ilusión y felicidad. Y así, honramos ese don.
Abrir los ojos a la mañana, es florecer. Es una exuberante explosión de vida que nos lanza al camino a compartir los frutos. Y en esa interesada gentileza, en ese intercambio natural afloran sensaciones, sentimientos, emociones. Que abonan la transmutación permanente, desde donde se forja la constante eclosión vital.
Despertar cada día, es encender esa chispa, esa llama que activa todo nuestro ser. Desde lo más evidente, hasta aquellos profundos mecanismos generadores de alegría, ilusión, buena onda, optimismo, felicidad y amor. Y sin darnos cuenta, esbozamos esa sonrisa amable, dejando en evidencia que todo está en orden.
Somos parte de la naturaleza y así vamos abriendo ciclos cada día. Y nos lanzamos al camino, a veces hacia donde van todos, otras a contracorriente. Sintiendo esa resistencia, esa rebeldía que nos subleva y nos hace lanzarnos en la búsqueda de las raíces del amor, la esencia de la vida.
Al levantarnos cada amanecer, al encarar ese camino lleno de sorpresas. Estamos asumiendo la responsabilidad de ser artífices de nuestra felicidad. Una expresión de amor hacia nosotros mismos, que se comparte con una simple sonrisa. Y esa capacidad de participar, es la mayor expresión de libertad, respeto y dignidad.
Para rendir tributo y honrar la vida que nos brinda otra oportunidad. Nada mejor que exaltar, alborotar y dar rienda suelta al niño que llevamos dentro. El modo más sano y eficaz de hacer aflorar ese don, que nos permite crear algarabía y felicidad. Esa que surge de la prodigiosa fantasía de un niño.
Nada más estimulante que abrir los ojos cada mañana y estar dispuestos a salir al camino. Y aprovechar la oportunidad, disfrutar la vida y rendirle tributo siendo un poco mejores que ayer. Y hacer lo que dicta el corazón con alegría, ilusión, amor y optimismo. Y compartir esa felicidad con nuestro entorno cercano.
Feliz viernes!!!!
Balance y reflexiones, es lo que hacemos cada cierre de ejercicio. Damos un repaso a lo sucedido, valorando los logros e intentando proyectar el futuro. Pasé casi dos meses sin hacer nuevas publicaciones en mis blogs. Se podría decir, que se agotó la inspiración, o qué perdí la motivación. Y ni una cosa, ni la otra. Simplemente, quienes intentamos ser positivos, creativos y motivadores, cada tanto, necesitamos desconectar. Permitir que decanten las ideas, las sensaciones y sentimientos, para evaluar hacia dónde dirigir el rumbo.
De todos modos, nunca dejé del todo los contactos cotidianos. Seguí desarrollando y comunicando una nueva forma de motivar y promover el amor, la felicidad y la esperanza. Y lo vengo haciendo de forma paralela desde algo más de un año, en mis redes sociales. Cada mañana, saludo a mis amigos y conocidos. Bien directamente a sus teléfonos móviles, o en redes más generales donde estoy en contacto con todas esas personas queridas. Y como es obvio, en esas redes sociales, también llego a personas que no conozco.
Y en ese lapso de reflexión, de valorar lo realizado, de sopesar lo que de verdad he aportado a quienes me rodean. Llegué a considerar que me había desviado del objetivo primario. En ocasiones, mis publicaciones en apariencia se alejaban de mi propuesta inicial. Pero lo cierto es que generar y compartir felicidad, es una tarea que depende de muchos aspectos de la vida. Además de un gran esfuerzo personal, en el que todos estamos comprometidos de un modo u otro.
La conclusión del balance y reflexiones, es que todo esta relacionado, cada persona, cada actividad, forman parte de una extensa red. Un entramado imperceptible, que actúa como sostén de todo lo que hacemos. Se trata de una materia etérea, algo intangible, insustancial, pero que posee un gran poder. Es algo que reside en nosotros, que solo depende de nuestra voluntad y esfuerzo para que aflore. Para que se manifieste y aporte toda su energía positiva. Emociones, sentimientos, sensaciones, que desencadenan nuestra fuerza vital. Es la felicidad, el amor y la esperanza lo que nos mueve. Lo que nos brinda la oportunidad cotidiana de seguir adelante.
En definitiva, los aportes que realizados, forman parte de todo ese entramado. Son comentarios que buscan llamar la atención y resaltar lo que más importa. Dar visibilidad al complejo sistema que todos tenemos incorporado en nuestra genética y que nos hace poderosos. Un don, con el cual es posible crear nuestro propio camino sin depender de nadie. Y que además nos permite ser capaces de compartirlo con quienes nos rodean.
Y por ahí seguiré, transitando esa senda. Un trayecto cotidiano plagado de sorpresas, que nos enseñan lo que de verdad es la vida. Una red entretejida con filamentos imperceptibles, que son parte nuestra. En la que todos nos encontramos relacionados de una forma u otra. En la cual, se ven reflejadas todas las acciones que unos y otros llevamos a cabo. Y en la que todo queda registrado. Por ello es importante que todos nuestros aportes sean positivos y contundentes hacia el logro del bien común. Y eso, es algo que vale la pena compartir con alegría, ilusión y esperanza.
Una nueva oportunidad de desvelar el mundo que nos rodea. De ser artífices activos y responsables de nuestro entorno. De ponernos manos a la obra con fuerza, ganas y actitud positiva, para construir esos vínculos indispensables. De generar y compartir alegría, ilusión y esperanza. De vivir apasionadamente.
Feliz martes!!!!
Darse cuenta que volvemos a comenzar, es esa confirmación. Esa primera prueba que nos pone en el camino y nos permite seguir adelante. Luego, solo nosotros somos responsables del trayecto, del modo como lo transitamos. Darse cuenta de lo determinante que resulta una sonrisa, confirma la vida.
Feliz lunes!!!!
Si la vida nos levanta el telón, permitiéndonos salir a escena a cumplir nuestro rol. Asumir la responsabilidad y desplegar por el escenario nuestro talento, es el modo idóneo de dar gracias. Cada ser tiene sus habilidades especiales y todos tenemos la capacidad de sonreírle a la vida y compartir algarabía.
Feliz domingo!!!!
Y así vamos yendo, un día tras otro, agradecidos por cada nueva jornada que disfrutamos. Lanzándonos al camino sin pensar demasiado. Simplemente sintiendo lo que nos dicta el corazón. Salimos con fuerza, ganas y actitud positiva a compartir alegría, ilusión y esperanza con quienes nos rodean.
Feliz sábado!!!!
Somos afortunados, estamos aquí nuevamente. Fieles a éste encuentro, qué procuramos mantener cada día. Y, que nos proporciona un elemento imprescindible, un soporte de unos a otros. Se trata de compartir felicidad, algo etéreo, insustancial, pero con la capacidad de ser el sostén de la vida.
Feliz viernes!!!!
Descubrir que gozamos de otra oportunidad, debería darnos el estímulo necesario para dedicarnos tiempo. Para tomar conciencia de nuestra importancia, por nosotros y por quienes nos rodean. Por eso, asumir la tarea de generar alegría, ilusión y esperanza es algo trascendente. En ello nos va la vida.
Feliz jueves!!!!
Cada mañana, al percibir el entorno con nuestros sentidos. Abrimos la puerta a un nuevo tiempo, a escribir un nuevo capítulo de nuestra historia. Y así, atesoramos instantes, episodios y vivencias que se generan a lo largo del trayecto. Y al compartirlas con alegría, sostenemos el presente creando esperanza.
Feliz miércoles!!!!
Ser conscientes de estar y poder salir al camino. Ponernos manos a la obra, en la tarea cotidiana de urdir el entramado de vínculos afectivos. Y permitir que afloren desde lo más profundo, las emociones positivas. Base indeleble que dibuja la sonrisa sincera, que compartimos. Eso es la vida. Feliz martes!!!!
El constante ir y venir que nos propone la vida cada amanecer. Es algo intrínseco a nosotros mismos. Lo llevamos impreso en nuestra alma, la fuente de esa energía espiritual que nos impulsa. Es, esa esencia nómada que nos lleva con alegría, ilusión y esperanza a recorrer el incierto camino que nos sorprende a cada paso. Feliz lunes!!!!
