Es un espacio para compartir mi visión de la Felicidad y sus vínculos con todos los aspectos de la vida, el hogar, el amor, los afectos, el trabajo, la sociedad, la política, la educación, la economía, la ciencia, la empresa y más.
La Felicidad es una tarea individual y colectiva, requiere un esfuerzo constante de todos nosotros, se relaciona e influye en todo, es un elemento vital para tener un mundo mejor.

viernes, 28 de febrero de 2014

Espíritu nómada y felicidad

“Uno sabe donde ha nacido, pero no donde morirá”, otra de las cosas que decía mi padre. Un dicho que tiene mucha vigencia, podríamos decir que global y moderno. Y si, es actual, pero no nuevo, es algo que forma parte de nuestra forma de vida desde siempre, está en nuestro ADN, pues desde tiempos inmemoriales, nuestra principal preocupación, es ocuparnos de satisfacer nuestras necesidades básicas, la primera es alimentarnos, procurarnos el sustento, de aquí que nuestro lugar está donde se encuentren los alimentos necesarios para ser felices. El espíritu nómada, que tenemos arraigado en nuestra genética desde siempre, es uno de los primeros mecanismos de generación de felicidad, que se desencadena a partir de la escasez de alimentos, y nos hace trabajar duro para encontrarlos en donde sea, para volver a establecernos y ser felices.  

Buena onda y felicidad

“Yo siempre digo, que me encuentro de forma excelente, y por dos razones fundamentales, los que te quieren bien se alegran y los que te quieren mal, ya te imaginarás”, siempre lo decía Julio y yo lo repito ahora en cada oportunidad que puedo, y lo hago porque este dicho, va más allá de quienes a uno lo quieren bien o mal. A mi criterio, existen otras razones, por las cuales me parece importante transmitir esto a los demás, una fundamental, es que genera buena onda, motiva y alegra a la mayoría de las personas. Lo cual me parece un buen aporte, una contribución para el logro de la felicidad individual y colectiva.

jueves, 27 de febrero de 2014

Filosofía y felicidad

Desde los filósofos griegos, que establecieron las bases del mundo en el que hoy vivimos, con los conceptos de república, democracia, átomo, alma, etc., que nos dieron además los elementos necesarios para continuar su desarrollo, hemos avanzado en dicho sentido. Si bien es así, y hemos ido adaptando y desarrollando dichos conceptos en función de las necesidades de cada momento (también siguiendo aquellas enseñanzas), a lo largo de la historia, hemos comprobado que en algunos casos nos apartamos de dichas máximas. Afortunadamente, también en muchos de esos casos, han aparecido elementos correctores, que nos volvieron a poner en el camino adecuado. Dado que la historia es cíclica, y que cada tanto se repiten determinados episodios, podemos decir, que si bien hemos desarrollado aquellos conceptos, no aprendimos mucho en otros sentidos, seguimos cometiendo los mismos errores cada cierto tiempo, debido a que cuando las cosas en general parecen ir bien, nos relajamos, y dejamos de trabajar duramente. Somos victimas de esa felicidad fácil, sin esfuerzo que a diario nos venden, sin tener en cuenta que nada es duradero, y menos si no hay un trabajo duro, serio y permanente como respaldo. En definitiva, el instante de éxito que implica ese esfuerzo constante, el efímero momento de felicidad logrado, no significa que debemos relajarnos y dormirnos en los laureles, debemos descansar si es necesario, para tomar impulso y reiniciar el sistema, esto es lo que en parte querían enseñar aquellos filósofos griegos.

miércoles, 26 de febrero de 2014

Ocupación y felicidad

“Yo, para no preocuparme, me ocupo”, me decía Milton hace más de 20 años. Esas pocas palabras, resumen una cantidad de cosas que tienen que ver con la voluntad, la actitud, la necesidad de hacer, de trabajar, para mantener la mente en constante estado de excitación, en constante búsqueda. Mente, cuerpo y alma puestos en la tarea que sea, seguramente darán como resultado, un episodio de felicidad. En oposición, la inacción, el dejarse estar, cuando van más allá del descanso necesario, para continuar la tarea emprendida, nos conducen al aburrimiento, al tedio, a la depresión, a la oscuridad. Desactivan, atrofian nuestra capacidad de ser felices, mediante la segregación de sustancias tóxicas, que producen un veneficio fulminante a nuestra felicidad individual y colectiva.

martes, 25 de febrero de 2014

Economía y felicidad

La mentes brillantes de la economía, nos demuestran de diversas maneras que la economía va bien o mal, en función de si las primas de riesgo, o las bolsas funcionan de determinada forma o no, nos hablan de los mercados, como entes abstractos, como si fueran seres extraterrestres, que hacen y deshacen en función de si las cosas van como ellos quieren o no.

Nos estimulan a que entremos en ese juego, como en los casinos virtuales que tan de moda se han puesto, nos venden la felicidad fácil, apostando nuestros ahorros, con sólidos argumentos para que apostemos a par o impar, etc., como si esa fuera la economía real.

Lo real, es que eso es una parte de la economía, es la que tiene que ver con el negocio de la especulación financiera, que se nutre de la economía que la mayoría de la gente entiende como real, la de nuestro día a día, donde las pequeñas y medianas empresas se desempeñan, generando un intercambio real de productos y servicios, y donde la mayoría de las personas desempeñan sus tareas, para ganarse dignamente el sustento.

Los emprendedores, los pioneros de esas pequeñas y medianas empresas, junto a sus colaboradores, son en gran medida los responsables de la felicidad social, asumiendo los riesgos y el duro trabajo que implica crear y mantener una empresa en funcionamiento.

lunes, 24 de febrero de 2014

Color y felicidad

Hay que darle color a la vida, y además sabores, aromas, texturas y sonidos agradables, desde nuestra indumentaria, hasta las cosas utilizadas para las distintas actividades que llevamos a cabo cada día. Las combinaciones que más nos gusten, en todo aquello que tenemos a nuestro alrededor, estimula nuestros sentidos. Es otra forma de poner a trabajar nuestro laboratorio bioquímico interno, para ser felices.

viernes, 21 de febrero de 2014

Besos y felicidad

Hombre cobarde no besa mujer bonita”, siempre se lo escuchaba decir a mi padre. Tener el arrojo, la osadía, la valentía necesarias para ello, desafiando a todos los inconvenientes que se nos presenten, a todos los miedos internos y externos, que ponen a funcionar también nuestro laboratorio bioquímico interno, nos hace segregar adrenalina, y seguramente alguna otra sustancia estimulante, que pone todas nuestras células y nuestros sentidos a trabajar con un objetivo, lograr la felicidad, ese beso ansiado. Otro efímero momento de felicidad, que disfrutamos por un instante, y cuyo estímulo, nos pone nuevamente, a trabajar duro para volver a experimentarlo.  

jueves, 20 de febrero de 2014

Drogas y felicidad

Volviendo al tema de la bioquímica de la felicidad, mencionadas en mi entrada “Epidemias de felicidad”, y a mi decálogo de tareas básicas para la felicidad, queda claro que nuestro organismo, se encuentra desde el punto de vista fisiológico, en condiciones de generar las sustancias requeridas para experimentar, el placer, la felicidad y el amor.

Por lo cual, solo necesitamos los estímulos adecuados, para que nuestro organismo segregue dichas sustancias. Dichos estímulos, pueden ser de diversa índole, como los detallados en el mencionado decálogo, también publicado en una de mis entradas. El trabajo duro sobre esos estímulos, es la gran tarea que debemos desarrollar cada día.

Hay quienes no tienen la voluntad de trabajar duramente y en consecuencia, recurren a determinadas sustancias estimulantes como el alcohol y otras más duras que terminan por hacernos infelices y nos arruinan la vida. Aquí aparece un nuevo elemento, a la hora de iniciar el duro trabajo de ser feliz, que es el “darse cuenta”, otra dura tarea para quienes se encuentran en dicha situación, tal vez más dura que la de ser feliz.

martes, 18 de febrero de 2014

Clientes y felicidad

 Hacer felices a nuestros clientes, es darles un producto que satisfaga sus necesidades, a un precio justo. Pero no es solo eso, además nuestros clientes quieren ser bien atendidos, desde la primera llamada telefónica, o contacto vía e-mail, web, en su primera visita a nuestra empresa, o bien en la primera visita que nuestro equipo de ventas le hace. Todo ello forma parte, de la primera impresión que nuestro cliente va a retener, de nuestra empresa, a lo largo de la relación comercial. Por ello, debemos trabajar mucho en esa primera impresión, que debe ser de buena calidad, acorde al producto y al servicio post-venta que se le brinde. La buena calidad del producto, el servicio, y la atención al cliente, se deben mantener y mejorar en el tiempo, pues si bien el primer impacto es el que quedará más arraigado, también puede modificarse, por las acciones posteriores. Todo ello, forma parte del duro trabajo para hacer felices a nuestros clientes, con la consecuente felicidad que nos va a generar esa ardua y constante tarea.

lunes, 17 de febrero de 2014

Emprendedores y felicidad 2

Casi todas las empresas que hoy conocemos, han nacido en un garaje, fruto de la destreza de sus fundadores, normalmente personas con un oficio o profesión, que a partir de una idea, y a su capacidad de desarrollar un producto, ya sea por necesidad, o por las ganas de emprender algo nuevo, se lanzan a ello. Son entonces emprendedores, desde la vocación de producción, normalmente sin una formación empresarial, ni vocación comercial, que se van haciendo al andar, por los múltiples tropezones, y a impulsos de esa felicidad generada por los éxitos efímeros y constantes. Suplen esas carencias en lo comercial, con el conocimiento del producto, la aptitud generada por los tropezones, la actitud de servicio, convencidos de las bondades de su producto, la honestidad, el orgullo, y la felicidad, de contribuir a hacer felices a sus clientes.

viernes, 14 de febrero de 2014

Hambre, Pobreza, Felicidad

Dos de los problemas crónicos de la humanidad, hambre y pobreza, desde siempre vienen siendo una gran preocupación de gobiernos, iglesias y organismos internacionales. Las acciones llevadas a cabo, aparentemente no han resultado, puesto que hoy en día existen más de mil millones de personas en esas situaciones. Tal vez el problema es que no hemos sido capaces de entender correctamente esas situaciones, desde la visión economicista que desde siempre se ha tenido de ellas. Es momento de cambiar esa visión, de entender correctamente esos flagelos de la humanidad, propongo, intentar descubrir que es lo que hace felices a esas personas y darles los instrumentos para que inicien el camino de retorno, a los lugares donde tienen sus raíces, y donde seguramente fueron muy felices.

jueves, 13 de febrero de 2014

Voluntad y felicidad

Somos un amasijo de electrones, integrados en gran cantidad de moléculas diferentes, asociadas en una innumerable cantidad de células, capaces de vivir, de engendrar vida, de sentir y pensar. Somos un reactor bioquímico, con la capacidad de sintetizar una enorme cantidad de sustancias, necesarias para sobrevivir, tanto en lo físico como en lo espiritual. Todos esos procesos bioquímicos, son automáticos e involuntarios y dependen de otras reacciones químicas, algunas de las cuales pueden ser influidas voluntariamente. Por lo tanto, si queremos, podemos influir en el funcionamiento de nuestro organismo de forma voluntaria. Con lo cual queda claro que podemos hacer cosas, que produzcan cambios positivos o negativos en nuestra vida. Es así que podemos quedarnos quietos y dejarnos caer en una profunda melancolía, o tomar las riendas de nuestra vida, y trabajar para generar cosas positivas en nosotros y en los demás. Ser felices, depende de nosotros, y de que tengamos la voluntad de serlo.

miércoles, 12 de febrero de 2014

Felicidad en pareja

La tarea de hacer feliz a nuestra pareja a lo largo de los años, además de requerir gran parte de los atributos de Dios, requiere de buena memoria, para recordar las cosas que hicimos bien al principio de la relación, e intentar hacerlas cada día mejor. Debemos hacer lo posible por sorprender en todo momento, ser innovadores, y no tener miedo a experimentar. La tarea de ser felices en pareja, implica un duro trabajo para mantener altos, los niveles de alegría, deseo e ilusión, al igual que nuestra felicidad individual, componente imprescindible y sin el cual no logramos el objetivo.

Aprendizaje y felicidad

En el entendido, que nadie es perfecto, que todos podemos equivocarnos, incluso los actuales líderes políticos, económicos, espirituales, etc., todos debemos aprender a ser más humildes y a reconocer nuestros errores. Saber reconocer nuestros fallos, nos hace más terrenales, más al alcance de los demás, nos iguala desde el punto de vista humano, y ayuda a desarrollar nuestro sistema de aprendizaje, con el cual obtendremos nuevos conocimientos y elementos, para desempeñarnos mejor, en todos los aspectos de nuestra vida, y en definitiva a mejorar la tarea más importante y fundamental, ser felices.

jueves, 6 de febrero de 2014

Epidemias de felicidad

Cuando nos reímos, estamos expresando una sensación de alegría, mostramos nuestra más profunda satisfacción por algún acontecimiento. Si en ese instante nos encontramos rodeados de otras personas, seguramente nuestra risa, provocará una risa generalizada, actuando de forma contagiosa sobre el grupo. Ese acto físico que es la risa, provoca que nuestro sistema endocrino, segregue ciertas sustancias responsables de la alegría. Algunos de esos responsables químicos del placer, la motivación, etc., son la dopamina, la serotonina y las endorfinas, éstas últimas, responsables de la felicidad. Es necesario trabajar duro, para estimularnos a poner en marcha constantemente nuestro laboratorio bioquímico interno, utilizando todos aquellos instrumentos, como el decálogo para la felicidad, entre otros, que nos generen alegría, risa, felicidad, para desde nuestra unidad cuántica, desatar epidemias de felicidad.

miércoles, 5 de febrero de 2014

Participación y felicidad

Sentir que uno forma parte de algo, que participa de un modo u otro, en el logro de objetivos mayores en materia colectiva, ya sean empresariales, deportivos, o de índole social (voluntariados), etc., nos hace sentir bien, que somos útiles y valiosos. Ese aporte que hacemos, en cualquiera de las actividades mencionadas, nos coloca como uno de los engranajes, dentro de la maquinaria que hace funcionar algo, generando el sentido de pertenencia. Pertenecer a un grupo, indica que somos confiables, que tenemos crédito, que los demás nos aceptan por aportar algo a la sociedad. Aquí tenemos otro elemento importante para nuestra felicidad individual y colectiva.

lunes, 3 de febrero de 2014

El poder y la felicidad

El poder atrae, seduce, a todos nos gusta manejar esa cuota de influencia, o decisión. En general, somos muy sensibles y propensos a mantenernos cercanos al poder y los poderosos, para intentar desde una posición privilegiada, copar el poder absoluto (“ L´état c´est moi”). Dicho absolutismo, es la trampa, en la que caen siempre o casi siempre, aquellas personas que ostentan el poder, ya sean empresarios, sindicalistas, políticos, etc. Ese factor todopoderoso y embriagante, que muchos identifican con la felicidad absoluta, dista mucho de la felicidad, que solo se encuentra, actuando dignamente para servir y hacer felices a los mandantes.