Al anochecer y luego de una estupenda cena en el hotel, salimos a dar un buen paseo para hacer algo de ejercicio y bajar la comida, así descubrimos estos rincones de Vigo que por la noche generan alegría, ilusión, buena onda y felicidad. Así vamos cerrando una jornada de aniversario maravillosa y llena de sorpresas. Mañana volveremos al camino nuevamente con toda la fuerza, a trabajar con ganas por continuar siendo sorprendentes, que descansen y tengan una buena noche. Les mando un abrazo!!!!
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