Hace un rato, mientras tomaba un café en el boliche del
barrio, ojeaba un diario y leía que los nuevos inquilinos de la alcaldía de
Madrid, lanzaron una web de contra-información, para contrarrestar las noticias
e informaciones que puedan hacer daño a su imagen pública.
Modestamente quiero volver a reiterar y recordar a los
gobernantes de turno que su tarea es hacer que el pueblo al que dirigen sea feliz y básicamente resolver los problemas de la gente que se encuentren dentro
de sus potestades. Si hacen las cosas bien desde ese punto de vista, no deberían
preocuparse por nada más.
Si esos gobernantes tienen la intención de hacer las cosas
correctamente, no deberían malgastar su tiempo ni el dinero de los
contribuyentes en hacer cosas que en definitiva no aportan nada, solo generan
más dudas, pues cuando alguien sale a contrarrestar informaciones o dar
explicaciones, mala cosa.
La mejor información son los hechos, las obras, el ejemplo
de buena gestión y de esforzado trabajo para satisfacer las necesidades de la
gente en todos aquellos ámbitos donde les sea posible. Lo demás son tonterías y
rebuscadas técnicas de la nueva cosmética política que solo enturbian y hacen
malgastar el tiempo y el dinero del contribuyente. La transparencia es otra
cosa.
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