Salir cada día al camino parece repetitivo, cansino, rutinario. Casi como mantenerse constantemente de buen humor. Pero ese esfuerzo aparentemente inútil por generar alegría, ilusión, buena onda, amor y esperanza, además de ser satisfactorio, es el sostén de la vida. A seguir compartiendo sonrisas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario