El renacimiento personal

 El renacimiento personal, es algo cotidiano. Cada mañana al abrir los ojos y respirar profundamente, somos protagonistas de ese don. Es la oportunidad que cada día tenemos, para hacer lo correcto y enmendar errores. Es la puerta al darse cuenta y sonreír. Es asumir el mando de nuestra vida y salir con fuerza ganas y actitud positiva a encarar nuestras actividades cotidianas. Todas esas tareas imprescindibles para nuestro bienestar y de quienes nos rodean. Hasta aquellas que no nos gustan, que nos rechinan y rechazamos, también debemos hacerlas de buena gana, de ellas dependemos en alguna medida. 

Nuestras actividades, aunque parezca que son para otros, siempre tienen un componente personal y además de lo que aportamos, estamos obteniendo algo para nosotros. Aportamos conocimientos y en general aprendemos mucho más. De ese esfuerzo también obtenemos recursos necesarios para sostener nuestra vida y de nuestras familias. Y solo por eso, vale la pena el esfuerzo y todo el cariño que nos sea posible imprimir a nuestro desempeño. Todo lo cual, no es impedimento para buscar aquello que anhelamos, lo que de verdad es nuestra vocación. Mientras tanto, debemos hacer todo generando alegría, ilusión, buena onda, optimismo, solidaridad, felicidad, amor, esperanza y fantasía.

Son sensaciones, sentimientos, afectos y emociones positivas con las que alimentamos el alma. Desde ahí, todo lo demás se hace fácil, se allana el camino y se abre la mente. También se abren puertas, muchas veces una sonrisa amable, crea ese clima distendido y relajado, a partir del cual sentimos los chirridos de esa apertura. Abrir puertas y despejar el camino, es el renacimiento personal, es la forma de ponernos nuevamente en carrera. Es tener claro lo que queremos y fijarlo como objetivo. Es ser constante en el esfuerzo, sin perder de vista la importancia de lo que debemos hacer para poder llegar. 

Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, compartiendo lo mejor y más auténticamente mío, mis afectos y emociones positivas, que lanzo a los cuatro vientos con cada pregón cotidiano.

A disfrutar el día!!!!! A seguir cuidándose!!!! Les deseo una buena jornada!!!!

Un abrazo!!!!!!