Es un espacio para compartir mi visión de la Felicidad y sus vínculos con todos los aspectos de la vida, el hogar, el amor, los afectos, el trabajo, la sociedad, la política, la educación, la economía, la ciencia, la empresa y más.
La Felicidad es una tarea individual y colectiva, requiere un esfuerzo constante de todos nosotros, se relaciona e influye en todo, es un elemento vital para tener un mundo mejor.

martes, 22 de junio de 2021

La distancia, el tiempo, la morriña


 La distancia, el tiempo, la morriña y todo eso que genera la diáspora. Algunos de esos elementos, poco a poco van siendo menos significativos. Las comunicaciones, desde el correo epistolar hasta el transporte, se han desarrollado tanto que todo es cercano e instantáneo. De todos modos, ciertos aspectos, siguen siendo igualmente incisivos y generadores de nostalgia. Haciéndonos sentir esa opresión en el corazón, que parece ahogarnos, dejándonos inmóviles y absortos en los recuerdos que brotan de lo más profundo. 

A medida que pasan los años, vamos tomando conciencia de su avance. Lo vemos en nuestros seres queridos, especialmente en aquellos que solo vemos de viaje en viaje. Observamos los efectos del transcurso del tiempo y de los obstáculos del camino. Y ahí, tomamos conciencia de todo eso, de cómo la vida nos va dejando en primera línea de salida sin paliativos. Así, despertamos ante una nueva situación, ahora pasamos a ser miembros de ese grupo de seres en extinción. Ahora nos vienen los apuros y la alegría, ilusión, buena onda, optimismo, solidaridad, felicidad, amor, esperanza y fantasía cobran su mayor relevancia.

Quienes hasta ahora no se habían dado cuenta de tal situación, quienes hasta el momento fueron postergando por diferentes motivos, apreciar en su justa medida los afectos y emociones positivas. Se encuentran de golpe ante un nuevo escenario, comienzan a sentir y a percibir cosas que hasta ahora nunca les había sucedido. O bien por negarse a experimentar su verdadero significado, o por miedo, o por estar demasiado concentrados en menesteres menos importantes. Al final, la distancia, el tiempo y la morriña, van haciendo su trabajo, nos van creando esa sensibilidad especial a lo largo de los años. 

Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, cada vez más sensible, cada vez más llorón, cada vez menos interesado en lo material. En fin, es lo que intento compartir cada vez que suelto a los cuatro vientos éste pregón cotidiano. 

A disfrutar el día!!!! A seguir cuidándose!!!! Les deseo una buena tarde!!!!!

Un abrazo!!!!!!

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