Hola, muy buenas tardes, hoy salimos muy temprano de casa, más que de costumbre, con un claro objetivo, cumplir con nuestra intención de visitar el santuario de Fátima cada año por éstas fechas. Ya es el tercer año que lo hacemos, el primero fue con Estela y Óscar que nos visitaron en aquel momento. A partir de ese viaje con ellos, Rosa y yo nos prometimos volver todos los años en la medida de lo posible.
Así es que hoy tenemos la alegría, la ilusión, la felicidad de haber cumplido nuevamente con aquella intención. Algo que estamos haciendo con toda la buena onda, el optimismo y el amor que nos caracteriza y que ponemos en todo lo que hacemos.
Ahora mismo estamos volviendo y luego de unas cuantas horas de conducción, decidimos parar para descansar y darnos una buena ducha. Paramos en Aveiro, un hermoso lugar de la costa portuguesa al que hacía mucho tiempo que no veníamos. Mañana si Dios quiere, volveremos al camino para acercarnos un poco más a casa.
En cuanto nos sea posible, saldremos a dar un buen paseo por la ciudad y disfrutar de sus encantos, degustando un buen vino de estas tierras tan generosas. Y así vamos yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia nuestro ser feliz, sin miedo, sin agobios, solo disfrutando lo que nos vamos encontrando a lo largo del trayecto.
Todas cosas simples, sencillos detalles que cualquiera de nosotros sería capaz de apreciar siempre que mantenga sus sentidos, su mente y su alma abiertas de par en par. Vamos a seguir disfrutando el día!!!!!
Gracias por estar ahí!!!!!
Gracias por compartir!!!!
Les mando un abrazo!!!!!
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