Muy buenos días, arrancamos temprano, algo más que de costumbre. Es una mañana diferente, además de hacer lo de siempre, hoy agregamos un paseo por Negreira. Acompañé a mi esposa, quien tenía que realizar algunas gestiones por allí. Un lugar al que hacía mucho tiempo no íbamos y que siempre resulta agradable.
Tiene un entorno sumamente amigable, natural, con montes centenarios y ese río Tambre que luce estupendo a su paso por el pueblo. Todo eso por sí solo ya nos genera alegría, ilusión, buena onda, optimismo, felicidad y amor. Hace que más allá de las gestiones, ya valga la pena haber hecho esa visita.
Un traslado imprevisto, como muchas cosas que nos suceden a diario y que es muy importante canalizar adecuadamente. Son oportunidades para hacer algo distinto, para enriquecer nuestra vida con nuevos elementos, con nuevos estímulos para nuestros sentidos.
Así, salimos un poco de nuestras rutinas, damos un nuevo perfil a la jornada, renovamos la algarabía y encaramos las actividades cotidianas con otra energía. Recargamos nuestras baterías, obteniendo más fuerza, más ganas y actitud positiva para lo que surja. Hacemos renacer nuestros afectos y emociones más profundas.
Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, renovándome cada día, renaciendo de las cenizas del día anterior. Reconstruyendo la vida, aprendiendo cosas nuevas dejando atrás lo pasado para vivir el presente, ese regalo divino. A disfrutar el día!!!!!
Gracias por estar ahí!!!!!
Gracias por compartir!!!!
Les mando un abrazo!!!!!!
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