Yo que sé, a diario, me pongo a reflexionar sobre los sucesos cotidianos y todas las cosas que me rodean. Escucho y veo discursos, situaciones, actitudes, movimientos y ejemplos que no me convencen. Seres, cuyo principal objetivo es derrotar al adversario a cualquier precio. Y se imaginarán de quienes son esos discursos y demás. Claramente, se trata de quienes son electos para dirigir nuestros destinos, ya sea como gestores, ya como opositores. Unos y otros aunque en especial quienes deben permanecer a la intemperie, parece que solo saben transmitir mensajes belicosos. Parece ser una contienda constante por el poder en sí mismo.
En el fragor de esa lucha intestina, se pierden y olvidan su rol principal. Dejan de ser los defensores del bienestar y felicidad de la gente de a pie, para convertirse en combatientes por ideales perimidos. La falta de evolución, la perdida total de contacto con la realidad, los lleva a avanzar hacia sus ciegos objetivos, sin pensar en lo que dejan a su paso. Desorden, caos, miseria y un ejemplo negativo para quienes vienen detrás. Son seres incapaces de un mínimo de empatía, una palabra de la que abusan. Ineptos creadores de alegría, ilusión, buena onda, optimismo, solidaridad, felicidad, amor y esperanza.
Sentimientos y emociones positivas, que resultan imprescindibles a la hora de acometer cualquier gestión por pequeña que sea. Con más razón, cuando se trata de gestionar y llevar adelante un gobierno, un pueblo, una ciudad, un país. Pero, y yo que sé, soy un simple ciudadano de a pie, que ante la incompetencia, desidia y falta de escrúpulos de una parte de los cuadros dirigentes, tomó decisiones. Y en mi caso, ya hace mucho tiempo, decidí que tengo que hacer todo lo que se encuentre a mi alcance por lograr aquello de lo que estoy convencido. Respetando la legalidad vigente, asumiendo mi responsabilidad y poniéndome manos a la obra sin esperar nada de nadie.
Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, compartiendo lo que siembro y cosecho a lo largo del camino. Trabajando duramente cada jornada para lograr esos objetivos fundamentales, empujado por los afectos y emociones positivas que soy capaz de generar.
A disfrutar el día!!!!! A seguir cuidándose!!!!! Les deseo una buena noche!!!!!
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