Muy buenos días, luego de unas jornadas de aportes irregulares al blog, voy poco a poco retornando a la regularidad. Ya en casa desde ayer, algo más recuperados del viaje, vuelvo a mis paseos tempraneros por el barrio. Vuelvo a las actividades cotidianas por el pueblo, a la algarabía del mercadillo de los jueves y a generar la misma alegría, ilusión, optimismo, buena onda, felicidad y amor de todos los días.
Es una tarea imprescindible en cualquier lugar que nos encontremos, es el elemento diferencial en todo momento. En todos los sitios que visito, mantengo siempre la misma actitud positiva, las mismas formas, la misma amabilidad y cordialidad para con las personas que me encuentro. En todos los lugares, hablen la lengua que sea, tengan la idiosincracia que sea, me responden con la misma sonrisa, con la misma amabilidad y respeto que les ofrezco.
El respeto, el buen trato, una sonrisa y un poco de buena voluntad por las partes hace que todo fluya en sus cauces normales. Es un lenguaje universal, algo que viene incorporado en nuestra genética y que solo debemos aplicar. Son esas cosas que no nos explicamos y que facilitan cualquier actividad, que abren puertas inesperadas.
Y por ahí voy yendo, hoy por el barrio, por Noia, ahora mismo, en casa, escribiendo luego de tomar un café con Rosa a media mañana. Siempre manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, sin apuros, con calma, solventando cada situación que me encuentro en el trayecto. Disfrutando cada minuto de vida, haciendo todo lo posible por no desperdiciar nada. Vamos a darle con todo!!!!!!
Gracias por estar ahí!!!!!
Gracias por compartir!!!!
Les mando un abrazo!!!!!!
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