Hola, muy buenos días, otra hermosa mañana de mercadillo en Noia, disfrutando a lo largo del río y la inmensa mar. El océano, los ríos y el propio nombre del pueblo, que forman parte de esa historia bíblica, de esos mitos sagrados transmitidos de generación en generación. Narraciones heroicas, que han trascendido hasta nuestros días, sacrificios que pocos estamos dispuestos a realizar hoy en día.
Y en esa inmediatez, en esa necesidad de lograr todo de forma instantánea, con el solo esfuerzo de apretar un botón, nos vamos aislando cada vez más. Nos vamos quedando solos, en medio de un campo diezmado, arrasado por nuestra exigencia material, por nuestra insaciable ambición. Así, perdemos de vista, la importancia de gozar, de sentir la alegría, la ilusión, la felicidad y el amor.
Eso que solo requiere de hacer un trabajo muy personal, aplicarse con fuerza, con ganas y actitud positiva. Eso, qué implica hacer aflorar todo nuestro caudal afectivo y emocional, para compartirlo con quienes nos rodean.
Así voy yendo, manteniendo firme mi rumbo hacia el ser feliz. Navegando por esa mar siempre cambiante que es la vida, dando mi mejor esfuerzo por llegar a buen puerto.
Gracias por estar ahí!!!!!
Gracias por compartir!!!!
Les mando un abrazo!!!!!!
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