Acopiando símbolos

Muy buenos días, de algún modo, todos tenemos una forma de guardar los gratos recuerdos, claramente los atesoramos en el corazón y vamos acopiando símbolos. En nuestro caso, con mi esposa decidimos al comenzar nuestro trayecto juntos, conservar los corchos de las botellas de vino que nos bebimos con la familia y los amigos. Los hemos puesto en distinto tipo de contenedores, hasta que encontramos un recipiente ideal al efecto, otro símbolo.
Y claramente cada uno de esos corchos, acumulados en ese gran botellón, tiene una historia compartida con familiares y amigos a lo largo del mundo. Sí, hemos traído corchos de todos aquellos eventos y lugares, donde lo primordial era compartir gratos momentos con esas personas queridas. Instantes donde siempre se festeja la vida, la posibilidad de estar juntos tomando un vino. Situaciones en las que desde el primer vistazo, ya se inicia el proceso interior en el que cada uno genera alegría, ilusión, buena onda, optimismo, solidaridad, felicidad, amor y esperanza.
Sensaciones y sentimientos que al chocar las copas de vino, cobran vida propia, alimentando y sosteniendo todo ese cúmulo de recuerdos atesorados desde el principio del camino. Un brindis que nos refresca la memoria, que nos acerca un poco más, haciendo aún más sólido y perenne el vínculo. Y al mismo tiempo, hace innecesario el contacto permanente, son afectos y emociones positivas que perduran más allá de todo. Ni el tiempo, ni la distancia, desvirtúan su esencia ni hacen olvidar todo lo vivido y sentido.
Así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, atesorando símbolos de los afectos y emociones positivas vividas intensamente. Símbolos que se corresponden con recuerdos de instantes, de personas, de situaciones y risas compartidas. Y hoy, en éste pregón cotidiano quiero brindar por todos esos símbolos, que representan los mejores momentos vividos por cada persona. A disfrutar el día!!!! A seguir cuidándose!!!! A seguir acopiando símbolos!!! Salud!!!!!
Les mando un abrazo!!!!!