Muy buenos días, mas temprano, recorriendo Noia en mis ocupaciones diarias, sin importar la lluvia o la tormenta, algunas cosas las tenemos que hacer sin excusas, son alma del regocijo familiar. Sí, hablo de todas esas tareas que llevamos a cabo por los alrededores de nuestra casa, en el vecindario, en el pueblo, pequeñas compras, trámites y gestiones diversas. En fin, una serie de cosas aparentemente insignificantes y que sin embargo de no hacerlas, pueden llegar a ser verdaderos focos de malestar y problemas para toda la familia.
Todas esas cosas que hacen a la armonía y al bienestar de la familia, desde contar con algo para un simple desayuno, hasta tener al día los recibos de energía y otros servicios. Parecen elementos triviales, de hecho cualquiera puede hacerlo, sin embargo, se requiere dedicarles el tiempo y los recursos necesarios, manteniendo el balance de las cuentas familiares. Tareas en apariencia banales, residuales, sin importancia, que forman parte sustancial, que son el alma del regocijo familiar y facilitan muchas cosas más importantes. Son facilitadores, elementos que ayudan sin dudas a encender la chispa de la alegría, ilusión, buena onda, optimismo, solidaridad, felicidad, amor y esperanza en cada miembro de la familia.
Claramente no todos esos factores actúan de la misma forma sobre nosotros, nuestra singularidad hace que cada persona reaccione de modo diferente ante un estimulo u otro. Lo cierto es que a todos nos afecta algo y eso hace que alguno de esos elementos o actividades surtan efecto de una forma u otra en nosotros. Y eso se traducirá en los afectos y emociones que compartiremos con ese entorno cercano. La calidad positiva o negativa de ellas, determinará la evolución de todo lo que nos rodea. Es claro que todo tiene una mezcla, un balance entre positivo y negativo, entre orden y caos, una cosa depende de la otra. Y no significa que todo tenga que ser positivo para que las cosas funcionen, el balance debe ser positivo.
Así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, haciendo cuadrar mi balance general y mi estado de resultados en números positivos. Es lo que comparto cotidianamente en mi pregón, la importancia de mantener ese balance, pues de todo se aprende, de todo se puede obtener algo útil. A disfrutar el día!!!! A seguir cuidándose!!!!! Buen fin de semana para todos!!!!!
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