Muy buenos días, al despertar, después de abrir la ventana, me encontré con ésta vista del barrio, algo espectacular. Un Miércoles para disfrutar con felicidad, alegría, ilusión, buena onda, optimismo y amor. Sí, es verdad, está lloviznando, el cielo casi cubierto, pero esos claros por donde se puede ver el cielo despejado, es suficiente para darnos ese impulso vital.
Así es, siempre se puede encontrar un buen motivo para creer, un pequeño detalle, algo aparentemente insignificante, que nos brinde la energía desencadenante. Esa fuerza, que desata toda nuestra algarabía, que pone a funcionar nuestros mas profundos mecanismos. Los que generan y hacen aflorar todo nuestro caudal afectivo y emocional, esos fluidos invisibles capaces de dar vida.
Y por ahí voy yendo, prestando atención a todo lo que me rodea, con una sonrisa en los labios, ya desde que me despierto. Así trabajo, así llevo adelante mi diario vivir, con fuerza, con ganas y actitud positiva. Haciendo el bien, buscando siempre el mejor camino para continuar, sorteando cada obstáculo en el momento que se presenta.
Es mi forma de mantener el rumbo fijo hacia mi ser feliz, que no siempre coincide con los demás. Eso, no debe ser un problema, cada ser humano debe seguir su camino, como seres singulares, tenemos nuestra forma de lograr la felicidad. Todas son válidas, todas tienen el mismo objetivo, solo debemos respetar a quienes nos rodean, pues somos libres, hasta que invadimos la libertad de los demás. Lo cual no está bien, lo cual va contra la felicidad colectiva y en definitiva contra nosotros mismos.
Gracias por estar ahí!!!!!!
Gracias por compartir!!!!!!
Les mando un abrazo!!!!!!!
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