Muy buenas tardes, preservar la vida, cuidar de quienes nos rodean y del entorno, ser amable y cordial, perseverar en mantener la armonía y el balance natural, eso es ser positivo, así hacemos fluir la esperanza. Así construimos sobre bases sólidas, así, logramos pensar libremente, sin ataduras de ninguna especie, sin dependencias, solo haciendo lo que sentimos por nosotros y nuestro entorno cercano. Así, generamos confianza, obtenemos crédito para llevar adelante todos aquellos emprendimientos que nos planteemos.
Cada día, al levantarnos, estamos de alguna forma haciendo eso, nos aseamos, desayunamos, compartimos instantes con nuestros seres queridos y salimos al camino a encarar con decisión lo que vaya surgiendo a lo largo del trayecto. En ello ponemos toda nuestra energía, nuestras ganas y actitud positiva, emprendiendo las actividades cotidianas en los diferentes ámbitos donde nos desempeñamos. Todas esas tareas realizadas a lo largo de la jornada, tienen un objetivo, un fin concreto, son nuestro aporte al bienestar personal y familiar. Es la esencia misma de la vida, por lo tanto, debemos realizarlo con la mayor alegría, ilusión, buena onda, optimismo, felicidad, amor y esperanza posibles.
Independientemente que algunas de esas tareas sean o no de nuestro agrado, tienen un objetivo superior, con el cual colaboramos a mantener dignamente ese bienestar de nuestro entorno cercano. Ese único motivo, no es trivial, ni único, en ese bienestar genérico, se incluyen una cantidad de necesidades básicas que requieren satisfacción. Claramente cada ser y cada familia en su singularidad, tendrá sus propias necesidades básicas definidas. De las cuales un buen número, serán coincidentes con las demás personas, en particular aquellas más elementales de todas, comida, abrigo, resguardo y contención afectiva.
Fueron y serán nuestras principales preocupaciones, luego, en función de su satisfacción, podremos pasar a otros niveles de necesidades menos trascendentes, pero también importantes para mucha gente. Entre otras, aprender a identificar los botones de encendido para hacer aflorar nuestros afectos y emociones positivas, siento que así hacemos fluir la esperanza.
Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, compartiendo mis pensamientos, abriendo mi corazón y dejando salir todo en éste pregón cotidiano que suelto a los cuatro vientos.
A disfrutar el día!!!!! A seguir cuidándose!!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario