Muy buenas tardes, aún persiste el calor pegajoso de una jornada agobiante, solo el horizonte multicolor y las caprichosas formas nubosas alivian el bochorno, pequeños detalles, mitigan fatigas. Y así, nos hacen el camino, los vínculos y la vida más fácil. Son elementos insignificantes en apariencia, pero con un poder increíblemente grande.
Son esas cosas simples, que nos vamos encontrando por el trayecto y a medida que sorteamos los obstáculos que siempre hay por ahí. Todo está en nuestra capacidad de atención y observación, de estar abiertos a las sorpresas que nos depara la vida. En cada una de esas situaciones, encontramos algo positivo, algo que nos motiva y nos hace seguir adelante. Son claramente las chispas que encienden la alegría, ilusión, buena onda, optimismo, solidaridad, felicidad, amor y esperanza.
Desde ese estado, desde esos afectos y emociones positivas generados desde lo más profundo de nuestro ser, es donde hacemos surgir la fuerza, las ganas y la actitud positiva. De ahí, es donde obtenemos la energía necesaria para ponernos manos a la obra con lo que sea. Y de ese movimiento creativo, somos capaces de encarar y emprender el desarrollo de nuestras ideas y ocurrencias.
Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, encarando cada día con todo ese empuje, esas ganas y actitud positivas, respaldado por toda esa carga emotiva. Con todo eso, me lanzo a escribir y compartir éste pregón cotidiano, que hoy salió algo más tarde de lo habitual.
A disfrutar el día!!!!! A seguir cuidándose!!!! A vivir que pronto pasa!!!!!
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