Sin darnos cuenta, somos receptores involuntarios de todo tipo de partículas cósmicas. Desde esas que forman parte del espectro visible. Hasta aquellas que no percibimos y que sin embargo impactan en lo más profundo de nuestro ser. Ahí en ese punto, donde se gesta el amor. Y toda esa energía cósmica, en su natural dualidad, que destruye y crea al mismo tiempo. Es una clara síntesis de nuestra historia. Personal y colectivamente, somos fruto de esa constante transformación. Estamos permanentemente transmutando, nada es lo mismo, nosotros mismos, renacemos cada despertar. Y en esa vuelta al ruedo, si bien mantenemos algunos procedimientos, la esencia y los valores, resurgimos de las cenizas.
En cada renacimiento cotidiano, desde esa ceniza acumulada, hacemos ese proceso de reconstrucción, juntando cada elemento y procesando la nueva mezcla irradiada por esa energía cósmica, en su faceta creadora. Y si bien toda la ceniza parece lo mismo, en realidad, debemos tener cuidado y ser muy selectivos. En esa confusión de residuos, es importante separar y descartar todo aquello que pueda ser una carga, un elemento que juegue en contra. Debemos reactivarnos con material y energía limpia, para crear alegría, ilusión, buena onda, optimismo, solidaridad, felicidad, amor y esperanza.
Al descartar los elementos tóxicos, materiales pesados que acumulamos en base a las frustraciones y los engaños cotidianos a los que nos someten. Especialmente quienes aceptaron la responsabilidad de dirigir nuestros destinos y que solo satisfacen sus apetitos personales. Pues al dejarlos de lado, permitimos que todas esos afectos y emociones positivas hagan bien su labor. desde ese punto especial, donde se gesta el amor. Esto último, es en definitiva lo que realmente importa. Despojarnos de esa dependencia nefasta, que nos impide ser, y ponernos manos a la obra con fuerza, ganas y actitud positiva a construir nuestro propio camino.
Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, haciendo mi camino a pesar de las trampas, obstáculos y las cosas negativas que me encuentro a lo largo del trayecto. De nosotros depende y por eso comparto éste pregón cotidiano, para aportar algo de esa energía cósmica que capto cada día.
A disfrutar el día!!!!!! A seguir cuidándose!!! Les deseo una buena tarde!!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario