La naturaleza que nos rodea, tiene una misión. Es el hábitat que nos permite sobrevivir y procesar nuestra transformación personal. Un espejo que nos muestra cuál mortales confundidos. Despejando ínfulas divinas, para ser simples sapiens ejemplares. Esa última cualidad, es algo que debemos aprender y desarrollar cada día. El ser ejemplar, es otra especie en vías de extinción, pero aún queda algo de esperanza. Sí, a pesar de la constante muestra de desprecio hacia los buenos ejemplos que existen a nuestro alrededor. Desafortunadamente, el avance tecnológico nos está conduciendo a un carrusel donde se juega con los estereotipos, belleza, riqueza, inteligencia, velocidad, juventud, en fin.
Toda esa vorágine, nos confunde y estimula las ínfulas divinas de mucha gente, que asume un rol de deidad, siendo un simple mortal. Se crea así, un olimpo de seres indecentes, que confunden todo eso con la vida. Sintiéndose superiores y con derecho a juzgar, a ser quienes pueden decidir por todos los demás, sin darse cuenta que han perdido la verdadera dimensión de la vida. Y básicamente, han abandonado los verdaderos principios y valores de nuestros ancestros nómadas. Esa situación, conduce a perder de vista la alegría, ilusión, buena onda, optimismo, solidaridad, felicidad, amor y esperanza, donde radica la verdadera riqueza y el control de los principios y valores originales.
Aceptar esa situación, ser conscientes de la importancia vital de los afectos y emociones positivas para todos nosotros, nos pone en nuestro lugar, de simples mortales. Que en la medida de manejar adecuadamente los mecanismos que hacen aflorar esas sensaciones y sentimientos, nos permite ser simples sapiens ejemplares. Ser ejemplo del buen manejo de esos afectos y emociones positivas, que también implica ser capaces de compartirlos con quienes nos rodean. Y así, extenderlos junto a los principios y valores fundamentales.
Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, compartiendo todo lo que me va surgiendo a lo largo del camino. Dejando constancia en éste pregón cotidiano que dejo caer a los cuatro vientos sin mayores pretensiones.
A disfrutar el día!!!!! A seguir cuidándose!!!!! Les deseo una buena noche!!!!!
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