Una flor de nuestro jardín

Hola, muy buenos días, el día a día en casa, nos hace prestar atención a todo aquello que en otra situación sería invisible o ajeno, hoy, una flor de nuestro jardín. Un pequeño detalle, un símbolo de ésta resistencia, de esta lucha cotidiana por sobrevivir a todos los desafíos que nos descubre la emergencia sanitaria.
Ya no solo se trata del extraño virus en cuestión, abarca otras materias de nuestra vida, desde la propia convivencia a la que no estábamos acostumbrados. Habíamos perdido de algún modo el contacto con la familia más directa, solo nos conectábamos malamente, los fines de semana y en vacaciones. Hasta el descubrimiento de nuestra total inmersión en lo laboral, la obtención de dinero para nuestras necesidades materiales. Dejando al descubierto que hemos anulado nuestros intereses personales más profundos, aficiones, anhelos y de algún modo también nuestras emociones.
Éste, parece un buen momento para redescubrir todo eso, para ponernos manos a la obra con fuerza, con ganas y actitud positiva. Zambullirnos en todos esos aspectos descuidados de nuestra vida, sacar a la superficie, todas esas cosas buenas que dejamos escondidas durante demasiado tiempo. De esa forma, no solo lograremos sacudirnos el aburrimiento y el estrés acumulados. Haremos aflorar alegría, ilusión, buena onda, optimismo, felicidad y amor. Sensaciones y sentimientos imprescindibles en todos los aspectos de nuestra vida.
Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, compartiendo mi pregón cotidiano, inyectando esa vacuna cargada de motivación, algarabía y esperanza. Vamos arriba, a descubrir!!!! A disfrutar la jornada!!!! Sobreviviremos!!!!
Un fuerte abrazo!!!!