Y en una de esas, nos vemos excusándonos por nuestra lentitud, por ir al ritmo que el cuerpo y la mente permiten, disfrutando cada detalle que surja en el camino, descubriendo el ritmo natural. Eso fue lo que me sucedió hoy por la mañana, mientras hacía mis tareas cotidianas por el pueblo. Al momento de efectuar el pago de unas compras, me demoré mientras juntaba las monedas necesarias y pedí disculpas por esa demora. Algo normal en casi todas las personas, especialmente quienes por la edad u otros motivos de salud, ya no tenemos la visión ni los reflejos en las mejores condiciones.
En el mismo momento que le pedí disculpas a la cajera y de alguna forma también a quienes estaban a la espera de poder pagar, tomé conciencia de la situación. Cada persona debe esperar su turno y lo aconsejable es manejarnos al ritmo del más lento, tomarnos las cosas con mas relax y buscar la forma de disfrutar el momento. También fue una de mis formas de expresar mi amabilidad, reconociendo la situación, cosa que todos comprendieron. Y, de alguna manera, fue una forma de tomar conciencia y crear alegría, ilusión, buena onda, optimismo, solidaridad, felicidad, amor y esperanza.
Si, aunque parezca mentira, esa toma de conciencia por mi parte y la de quieres estaban retenidos en la cola, de alguna forma nos identifica a todos. Nos hace reflexionar sobre la velocidad de vértigo que le estamos imprimiendo a todo lo que hacemos. Lo poco que nos detenemos en observar y disfrutar de esos pequeños detalles que la naturaleza construye a su ritmo. Que por más que a nosotros se nos ocurra acelerarlos, es imposible, hay que respetar y seguir descubriendo el ritmo natural de las cosas.
Y así voy yendo, manteniendo el rumbo fijo hacia mi ser feliz, compartiendo lo que me voy encontrando en el camino y las cosas que como la foto de hoy me hacen llegar. Esa colaboración de hoy fue de nuestra prima Chiti, a quien agradezco la foto.
A disfrutar el día!!!!! A disfrutar el finde!!!!! A seguir cuidándose!!!!!
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