Como todas las mañanas emprendí el camino que elegí para mí, ese que requiere mucho esfuerzo, mucha energía, mucho trabajo, mucha actitud positiva, pues cada día surgen cosas que nos dificultan el avance. De todos modos, seguimos adelante, continuamos más allá de pequeñas interrupciones que básicamente son momentos de aprendizaje, momentos para recuperar el aliento y volver al sendero. Esa ruta que nos trazamos y que se hace sinuosa conforme nos adentramos en ella, también resulta estimulante, enriquecedora, desafiante, sorprendente, en la medida que seamos capaces de estar a la altura, que seamos capaces de generar alegría, ilusión, buena onda, optimismo y felicidad con lo que tengamos a mano, por nuestros propios medios.
Siempre voy por ahí, aprovechando el día, aprovechando cada momento, disfrutando de cada cosa, de elementos tan simples que muchas personas ni los ven, extrayendo de cada situación, de cada detalle, de cada partícula elemental toda la energía, toda su esencia, todo el alimento para el alma que sea posible.
Esa es mi gran motivación, vivir y gozar cada momento, cada instante como si fuera el último, respetando mi entorno, compartiendo con todos quienes me rodean esas vivencias, esos sentimientos, esas emociones, pues es lo único que me pertenece y que puedo disponer libremente, sin miedos, sin culpas.
Les mando un abrazo!!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario