Ya entrando en el anochecer, fuimos hasta Porto do Son, un lugar bellísimo que además en mi caso tiene un significado muy importante. Es el pueblo donde nació mi padre, en la calle de Jesus, muy cerca de la playa y también el ayuntamiento de mi madre, quien nació en Baroña, muy cerca de allí. Y si, mis raíces están por esas piedras, donde seguramente mis antepasados caminaron sobre ellas, muy probablemente pescando, se trata de un pueblo de pescadores y durante siglos esa fue la actividad principal. Andar por allí, me trae recuerdos y me genera alegría, ilusión, buena onda, optimismo y felicidad.
Mañana volveremos al camino si Dios quiere, a continuar con nuestras actividades, con nuestra búsqueda continua de ese factor que nos ayude a lograr esa felicidad vital. Ahora nos vamos a preparar para irnos a dormir temprano, estamos muy cansados, hoy fue una jornada de mucha actividad. Que descansen y tengan una buena noche.
Les mando un abrazo!!!!
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