La hermosa tarde de hoy, me devuelve nuevamente a la memoria el atardecer del domingo pasado, mientras dábamos un paseo por la costa con mi sobrina Noeli y su novio Gonzalo, regresando a casa desde A Coruña. La foto es una panorámica de cabo Vilano, un lugar que siempre me llama la atención y me emociona por su belleza, por la fuerza de la naturaleza, por la energía que me transmite, por la alegría, la ilusión, la buena onda, el optimismo y la felicidad que me genera.
Además del respeto, la prudencia, que debemos tener al aprovechar cada día, disfrutando y gozando todas esas cosas que la naturaleza y la vida nos dejan a lo largo del trayecto. De todo ello debemos extraer su esencia, su energía positiva, con la que estimular nuestro aprendizaje, nuestra reflexión, nuestras emociones, e impulsarnos a compartir todo ello con nuestro entorno cercano.
En ese acto generoso y valiente que significa poder compartir con quienes nos rodean, estamos generando un aprendizaje que nos gratifica de muchas formas y nos da felicidad.
Les mando un abrazo!!!!!
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