Hola, muy buenos días, así arrancamos la semana con neblina y gracias a Dios, pues es en verdad una bendición tener la oportunidad de retomar nuestro camino, de salir al ruedo y hacer todo aquello que nos venga en gana. Si, es algo maravilloso y yo doy gracias por ello, por poder disfrutar de esa neblina molesta, por ser capaz de ponerme manos a la obra para preparar el desayuno para mi esposa y para mi mismo, por compartir la alegría, la ilusión, la buena onda, el optimismo y la felicidad de estar vivo.
Por ahí voy yendo, aprovechando el día y cada cosa que me encuentro a lo largo del trayecto, disfrutando de esos pequeños momentos en los que logro extraer la esencia, la energía interna de cada cosa, de cada situación, de cada encuentro. Esa energía remanente que nos queda después de un encuentro fortuito, es la que nos ayuda a hacer aflorar toda esa carga afectiva y emocional, que en mi caso, lanzo a los cuatro vientos a través de estos medios, compartiendo de este modo todo mi caudal emocional positivo.
Así, hago mi camino, sin apuros, haciendo las pausas necesarias y siempre manteniendo ese rumbo fino hacia el ser feliz. Ese ente abstracto, algunas veces incomprensible que les recomiendo en cada publicación. Anímense, vale la pena intentar ese primer paso en su búsqueda personal.
Gracias por estar ahí!!!! Gracias por compartir!!!!!!
Les mando un abrazo!!!!
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