A la mañana, después de desayunar y dejar todo ordenado en casa, me puse un buen abrigo, recogí uno de los paraguas y allá me fui, a realizar mis tareas cotidianas por Noia. La lluvia y el viento hacen que la sensación térmica sea algo fría, aunque al ponerme en movimiento esa sensación cambia, pues además del buen ejercicio de caminar, en mi caso además hacerlo bajo lluvia, me genera alegría, ilusión, buena onda, optimismo y felicidad. Con todo eso el calor lo siento de los pies a la cabeza, a pesar de sentir la humedad de cintura para abajo.
Y por ahí vamos yendo, aprovechando el día, disfrutando de todo, si claro, también del mal tiempo, tiene sus aristas buenas, solo es necesario observar atentamente y estar dispuestos a ponernos manos a la obra con todo aquello que la vida nos deje a lo largo del trayecto. En esa tarea, debemos poner toda la fuerza, todas las ganas y la actitud positiva que seamos capaces. De ese modo podremos extraer esa energía necesaria para hacer aflorar todas esas sensaciones, esos sentimientos y emociones positivas.
Con ellas en ebullición, además de gozarlas, podremos compartirlas si tenemos esa capacidad, si somos lo suficientemente generosos, desinteresados, solidarios y valientes. Solo le puedo decir que compartir todas esas emociones auténticamente nuestras con quienes nos rodean, es algo sumamente gratificante.
Anímense a transitar éste camino, dejen de lado los miedos, las malas influencias y den ese primer paso, vale la pena intentarlo.
Gracias por estar ahí!!!! Gracias por compartir!!!! Gracias por intentarlo!!!!
Les mando un abrazo!!!!!
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