Después de hacer un par de cosas por Noia, al final de la mañana nos fuimos con Rosa hasta Santiago, tenía hora para el neurocirujano, allí luego de una corta espera, nos atendió el mismo médico que me operó hace ya algo más de dos años. La resonancia magnética, nos mostró que todo está en orden, que la intervención fue correcta y de momento va todo bien, ya me dio una nueva consulta de control para dentro de dos años, con lo cual pueden imaginar la alegría, la ilusión, la buena onda, el optimismo y la felicidad que nos generó esa noticia.
De allí, nos fuimos a hacer unas compras y luego fuimos a seguir festejando la buena noticia comiendo en un restaurante japonés que abrió recientemente en Santiago. Así vamos yendo, aprovechando el día, disfrutando de todo lo que la vida nos va dejando a lo largo del camino. Más tarde, ya en el pueblo y a pesar de estar extenuado por varias razones, entre otras el afloje de esa ansiedad, de esa tensión previa a la consulta, me fui hasta Macenda a dar unos golpes en el campo de prácticas del pitch and putt.
Ahora mismo, ya en casa, estoy escribiendo estas líneas y continúo gozando la noticia, sigo en mi senda con ese rumbo fijo que tan buen resultado me da y que tanto bien me hace. Eso es lo que quiero compartir con quienes me rodean, eso es lo que vale la pena, lo que nos hace mejores personas. Anímense, cada persona elige su camino, elige la vida que más le gusta, yo hace mucho que tengo claro mi norte.
Gracias por estar ahí!!!!!!
Les mando un abrazo!!!!!!!
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