La mañana por Noia fue como siempre fructífera, realicé todas las cosas que tenía previstas y más allá de la pertinaz llovizna que no exigía paraguas, aunque lo que se puede observar en la foto, da otra impresión. Sin parar, al llegar a casa me puse manos a la obra para preparar de comer, hoy decidimos hacer unos tallarines caseros, preparé la masa, encaucé la salsa de tomate, todo con mucho amor, alegría, ilusión, buena onda, optimismo y felicidad.
A estas horas ya hemos comido y les puedo asegurar que no sobró nada, quedaron exquisitos, modestia aparte, jeje. Y así vamos yendo, aprovechando el día, disfrutando de cada cosa, de cada tarea, en la que siempre pongo todo lo que tengo, toda mi fuerza, mis ganas, mi cariño y la actitud positiva característica.
Todas esas actividades, todas esas tareas, me generan una energía especial, me hacen aflorar todas esas emociones positivas, que comparto a lo largo de cada jornada con quienes me rodean. Ese acto de compartir, de abrir mis sentimientos y exponerlos, es algo que me parece buena cosa, me parece que todos deberíamos de algún modo mostrar esa faceta. A mi me hace bien y particularmente me resulta gratificante, pues de vez en cuando hay alguna respuesta positiva, con lo cual me reafirmo en ello.
Gracias por estar ahí!!!!!
Les mando un abrazo!!!!!!
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